Empleo apuesta por la formación como clave en la reconversión del sector de la piedra natural

Un estudio identifica las principales necesidades formativas de las empresas del mármol y las ocupaciones más demandadas

El director de la escuela del mármol y la delegada

ALMERÍA.- La delegada de Empleo, Francisca Pérez Laborda, ha apostado por la formación de los trabajadores y directivos de las empresas de la piedra natural como “pieza clave en la reconversión que el sector tiene que acometer para mantenerse en el mercado”. Así lo ha manifestado hoy en la presentación del estudio ‘Análisis y detección de necesidades de cualificación en el sector del mármol en Andalucía’, realizado por la Escuela del Mármol de Andalucía (EMA), consorcio formativo dependiente del Gobierno andaluz.

El estudio, enmarcado en el programa I I (investigación e innovación) de la Consejería de Empleo, ha sido financiado con 75.000 euros y elaborado a partir de encuestas a 330 empresas andaluzas, 105 de ellas de la provincia almeriense, así como con cuestionarios y opiniones de expertos en el sector de la piedra natural.

Según detalla el estudio, antes de la crisis en Andalucía había 1.200 empresas dedicadas a esta actividad que empleaban a más de 6.000 personas y facturaban 675 millones de euros. “La fuerte dependencia que el mármol ha tenido de la construcción ha hecho que la crisis le haya afectado profundamente. Ante la escasa demanda interna, las empresas tienen que dar un paso adelante y lanzarse al mercado internacional y para ser competitivas en él, tienen que innovar”, ha explicado la delegada de Empleo.

Francisca Pérez ha señalado que el sector andaluz de la piedra está compuesto mayoritariamente por pymes y micropymes, “lo que supone un obstáculo para la innovación que puede superarse si las empresas se unen y crean economías de escala de manera que sean capaces de lograr una mayor diferenciación y especialización de sus productos para cada cliente, nuevos productos y nuevas aplicaciones de los existentes y de poner en marcha servicios novedosos como las reformas o la restauración de piedra”.

En este sentido, la responsable de Empleo ha afirmado que “estos necesarios cambios conllevarán la necesidad de contar con unos recursos humanos altamente especializados que puedan asumir las nuevas tareas”, por lo que la formación tanto de los trabajadores como de los mandos intermedios y los propios empresarios “será uno de los ejes vertebradores de la reestructuración del sector”.

Entre los retos planteados por el estudio destaca el de conseguir una mayor motivación de parte del empresariado andaluz de la piedra natural hacia la formación, ya que cerca de la mitad de las empresas no realiza acciones formativas ni las considera de interés. “Tenemos que impulsar la cultura del conocimiento, haciendo ver a estos empresarios que la formación no es un gasto, sino una inversión”, ha afirmado Pérez Laborda.

Este estudio servirá a la Escuela del Mármol de Andalucía, recientemente calificada como Centro de Referencia Nacional en la formación profesional en el sector de la piedra, para ajustar su oferta formativa a las nuevas necesidades de las empresas. No obstante, según ha destacado la delegada de Empleo, “la EMA, en su filosofía de adelantarse a las necesidades del sector, lleva años ofreciendo los cursos que los empresarios encuestados demandan, como los de rehabilitación de piedra, comercialización y marketing internacional, diseño asistido por ordenador o uso de maquinaria de control numérico”.

Así, entre las materias más demandadas por las empresas están los idiomas, como el inglés y el chino, que empieza a despertar interés; las aplicaciones informáticas de diseño, Internet y gestión; el control de calidad y la atención al cliente; las técnicas de ventas, publicidad y comercio exterior; el análisis contable, la elaboración de planes de financiación y la administración internacional; la gestión de compras y ventas on-line y la formalización de cobros; y la legislación ambiental que afecta al sector. Además, destacan los cursos de prevención de riesgos laborales, la formación más solicitada en los últimos años por su obligatoriedad, pero que las empresas reclaman que esté más adaptada a cada puesto y sus riesgos específicos, así como los de marmolista de taller, uso de maquinaria de control numérico, técnicas de colocación de piedra y restauración.

Las ocupaciones que los empresarios manifiestan que tienen más dificultades de cubrir son las de marmolista u operario polivalente con conocimientos de medición, montaje y colocación, operario especializado en talla y escultura, operario experto en maquinaria automatizada, comerciales y operarios de cantera.