lunes, 6 de diciembre de 2010

ALMERÍA PRODUCIRÁ EN 2011 ELECTRICIDAD DE LA BASURA


www.elalmeria.es

Las pruebas realizadas en la planta de clasificación y compostaje han dado resultados positivos · Cespa adapta sus instalaciones para poder obtener biogás de los residuos

Los residuos compactados son trasladados a empresas especializadas en reciclaje de materiales.
Almería capital está dando un paso más en su apuesta por la sostenibilidad medioambiental con las obras de ampliación de la planta de clasificación y compostaje de residuos que gestiona la empresa concesionaria del Ayuntamiento Cespa, las cuales van a permitir el próximo año rentabilizar las 124.000 toneladas de basura que genera la ciudad al año mediante su transformación en biogás.

Una vez concluido el proceso administrativo y obtenida el visto bueno municipal al proyecto, Cespa ha venido desarrollando reformas para adaptar las instalaciones y hacer posible la obtención de electricidad, aprovechando la existencia del antiguo vertedero, donde años han ido fermentando los residuos orgánicos.

Los trabajos han consistido en la ampliación de los equipamientos, el sellado del viejo vertedero, así como su impermeabilización, para evitar las fugas de gas. "El biogás está compuesto de metano, dióxido de carbono y otros gases, que se generan de la fermentación de los residuos en ausencia de aire, fundamentalmente de residuos orgánicos, RSU", explica Ignacio Ojeda, gerente de Cespa. Es por ello que la empresa quiere aprovechar el biogás que se ha ido produciendo años atrás en el antiguo vertedero antes de la construcción de la nueva planta, en el año 2004.

Con esta finalidad, Cespa ha realizado las pruebas oportunas para confirmar la existencia de biogás en los vertidos fermentados antes del sellado. El resultado ha sido positivo, por lo que la concesionaria llevará a cabo en enero la siguiente fase del proyecto de ampliación.

Consistente en la creación de pozos y en la instalación de sistemas de bombeo para la extracción del gas, así como el equipamiento necesario para la posterior limpieza mediante filtros, estas actuaciones absorberán entre dos y tres meses, según explicó Ojeda, por lo que las expectativas de Cespa es poder empezar a obtener biogás a partir de marzo o abril.

Cespa cuenta con experiencia en este sistema de un enorme potencial, no sólo por evitar daños ecológicos, sino por su capacidad para la obtención de energía de forma eficiente. Posee en Murcia otras instalaciones que fueron pioneras en España en aplicar este sistema que aprovecha el proceso natural de descomposición de los residuos para la obtención de biogas, capaz de generar, al final del complejo proceso, tres megavatios de potencia al año, lo que económicamente se traduce en más de 1.084.337 euros.

La planta que gestiona Cespa en la región vecina es capaz de obtener electricidad como para auto abastecerse e iluminar 72.000 farolas los 365 días del año.

Lo lleva haciendo desde hace cuatro años y el proyecto de Cespa para Almería capital se basa en la experiencia murciana con la ventaja añadida de que está prevista la aplicación de metodología más moderna.

Aunque se desconoce con exactitud el nivel de producción de biogás de la planta almeriense, empresa y Ayuntamiento barajaban unas previsiones con anterioridad a iniciar al proyecto, sustentadas en el número de habitantes de la capital y en las toneladas de residuos que los almerienses generan al año.

Sobre estas estimaciones iniciales, del concejal del área de Medio Ambiente, Esteban Rodríguez, avanzó el pasado año la posible consecución de 1,5 megavatios (la mitad que Murcia por el número de población que utiliza esta planta), de los cuales el 20% facilitaría el funcionamiento de las propias instalaciones y el 80% restante formaría parte de la red de abastecimiento eléctrico de Endesa.

"Son todo ventajas: la planta se autoabastece; se acaba con el trabajo más penoso que obliga al operario a estar en contacto directo con los vertidos; se genera energía eléctrica; se fabrica la materia prima para la creación de nuevos envases de plástico; y el coste es cero", destacó entre otras bonanzas el edil de Gial.

Y es que el proyecto de ampliación contempla cuatro grandes actuaciones, que permitirán, además de la obtención de biogás el próximo año, la automatización de la línea de triaje donde se separan los vertidos según su tipología; mejorar la calidad del compost, que luego se emplea como abono natural; o la construcción de una nueva subplanta para el reciclaje de los envases de plástico.

El coste de la modernización de la planta de Almería alcanza la cifra de 15,5 millones de euros. No es una inversión a asumir de forma directa por el Ayuntamiento, sino que el gasto lo contrae la empresa. A cambio, Cespa ha conseguido ampliar en cinco años la concesión de la planta que tiene contratada por 15 desde hace cinco. El Ayuntamiento le paga un canon anual a Cespa por la gestión de la planta de residuos de 4,5 millones de euros.

La producción de biogás permitirá a la planta autoabastecerse y obtener ingresos del excedente de esta energía alternativa.

Dependiendo de distintas variables, cada tonelada de residuos eliminada en un depósito controlado puede producir teóricamente a lo largo de su vida útil entre 100 a 200 Nm3 de biogás , con un poder calorífico inferior comprendido entre las 3.500 y las 4. 500 Kcal/Nm3.

La producción de biogás no es un proceso instantáneo ni de corto plazo. En la práctica, los residuos comienzan a producir biogás algunos meses después de vertidos.

Este biogás es combustible y podrá ser utilizado en la cocción de alimentos, para la iluminación de naves y viviendas, así como para la alimentación de motores de combustión interna que accionan máquinas, herramientas, molinos de granos, generadores eléctricos, bombas de agua y vehículos agrícolas o de cualquier otro tipo.

No hay comentarios: